Tres bandas catalanas muy entes cerraron la nueva edición del BIME City.
Lugar: Bilborock.
Público: cerca de media entrada.
Duración: 125 minutos.
29/10/2020
Segunda y última jornada del descafeinada BIME City. Este año el festival en la ciudad ha estado protagonizado por todo bandas nacionales y en menos salas que otros años. Y es que la pandemia está castigando mucho a la cultura y muchas salas de nuestra villa todavía ni han abierto desde el primer confinamiento. En esta segunda jornada se notó más afluencia a Bilborock, que a pesar de todo, ni mucho menos se llenó.
Para las 20:00h. ya estaban sobre el escenario el dúo femenino catalán
Tarta Relena. Muy curiosa su propuesta y es que en ocasiones parecía que en la antigua iglesia de La Merced volvían a cantar un coro. Buena parte de su media hora de directo fue a capella aunque en algunas canciones utilizaron algo de música minimalista. El dúo repasa toda la tradición mediterránea con sus cantos y sus voces destacando su conjunción en temas como
Morenika que es un tema serfardí. No dudaron en cruzar el inicio de
Lionsong de Björk con el tema mallorquín
Tres Morillas que fue el mejor tema de la noche y en los pocos que metieron algo de música. Presentaron las canciones de sus dos EP´S publicados y se despidieron comentando que este era seguramente su último concierto del año con
Tou Votanikoú que es un tema griego que tanto Marta y Helena dedicaron al precursor del tema que habla del barrio griego y es que según contaron había muerto en domingo. Curiosa mezcla de sonidos mediterráneos cantados con mucha devoción y con un perfecto juego de voces.
Los siguientes eran el trío
Jolly Damper provenientes también de Barcelona (más exactamente del Penedés). Lo que más destacó de la banda fue la voz dulce de Paula Valls, perfecta para los sonidos ambientales, trip hop, dream pop que practica la banda. Con claro sonido británcio
Jolly Damper cuidan las suaves melodías electrónicas y también destaca la pegada de su batería que rompe el posible ambiente más tranquilo para que las canciones tengan mayor empaque. Concierto correcto que juega sus bazas cuidando mucho la melodía y transportándonos con sus ambientes a otros lugares más oníricos.
La banda encargada de cerrar el
BIME City fueron el dúo de Mataró
Playback Maracas. Una pena. Así podíamos resumir su corto directo. Ha sido la mejor banda de Bilborock en sus dos días de
BIME, sorprendiendo con su mezcla de electrónica instrumental con una garra y una fuerza espectacular. Pero tardaron demasiado en montar el escenario. Actuaron detrás de una cortina negra para los visuales y su concierto empezó tarde por lo que al final les tuvieron que cortar el sonido en lo más alto de su directo a las 22:05h. Una auténtica pena. Y el dúo nos sorprendió para bien. Espectacular inicio con los temas
Buenas Noches y sobre todo la explosiva
Salami. Un tema creciente llegando hasta la épica de los
Muse más electrónicos de
Take A Bow. Le pegada del batería era escalofriante y la música con los visuales y la banda actuando casi a oscuras dotaba al concierto de grandes sorpresas. Todo un descubrimiento
Playback Maracas. Una electrónica muy bien entendida que entre loops, voces pregrabadas que hablaban sobre la humanidad y sin olvidar ciertos punteos de guitarra (fue la única banda de la noche que utilizó el instrumento). Lo dicho una pena que tuviesen que cortar su directo por tiempo. Una vez más maldito coronavirus.