LOS SALVAJES THE WIZARDS DINAMITAN BILBOROCK

Los bizkainos The Wizards desparramaron sobre el escenario de Bilborock actitud y energía.

Lugar: Bilborock- La Merced.

Público: 125 personas.

Duración: 75 minutos.

03/10/2014

   Tercera jornada del concurso villa de Bilbao en su sección metal con uno de los platos fuertes de este concurso. Como es habitual un grupo bizkaino congregó al mayor número de personas de la noche y es que The Wizards están dando que hablar y no es para menos.

    Puntuales a la cita salían The Wizards a incendiar Bilborock. Sus componentes son de sobra conocidos entre la escena más local ya que hay gente de grupos como Chivo o The Sulfators por lo que son una banda con buenos mimbres. Encabezados por la presencia y voz de Ina, todo un portento, The Wizards ofrecieron un concierto impecable en la línea que separa el rock acido con poso de stoner pero influenciado en cierta forma por el metal de Black Sabbath. La dureza de las guitarras de Fel Belushi y Jorge Sulfators, el contundente bajo de Eneko Chivo dan un sonido variado al grupo consiguiendo de esta forma que cada canción del grupo suene diferente. Joyas como Misty Day sonaron redondas en un grupo muy compenetrado y que ofreció un gran concierto. De lo mejorcito hasta el momento. En noviembre pretender parar un par de meses para preparar su primer LP.

    Luego llegó el turno desde Navarra del cuarteto Evil Killer. Según comentaron en el concierto llevaban 5 meses sin dar conciertos por diferentes motivos y eso se noto y mucho. Con bastante mal sonido, el grupo con su speed metal en la línea de Accept no llegó a cuajar. Mikel estuvo flojo de voz y no llegaba a los registros que la canción pedía, sonaron demasiado embarullados y repetitivos con largos desarrollos y riffs rápidos. La mejor canción de la noche fue Blooods of the Witches con un estribillo marcado y a pesar de su buena puesta en escena con continuas carreras sobre el escenario y varios buenos solos de guitarra el grupo no logró ofrecer un buen concierto debido en gran parte por un sonido muy deslucido con una batería demasiado alta que sepultaba a los demás instrumentos.