Txema Babón en plena exaltación de energía, diversión y desenfreno en el Basque Fest.
Lugar: Kafe Antzokia.
Público: 375 personas.
Duración: 145 minutos.
16/04/2022
Última jornada del Basque Fest Rock City en el Kafe Antzokia. Sobre el papel la jornada del sábado era la más atractiva y no decepcionó. Bastante público, el día que más, ansioso de pasarlo bien y degustar a dos buenas bandas de rock con capacidad para sorprender al público. La velada comenzó con media hora de retraso debido a las procesiones de Semana Santa y es que la sala tiene como vecinos una iglesia y no podían molestar con el sonido a las 22:00h. como estaba previsto.
Los primeros en subirse al escenario a las 22:30h. eran
Garbayo presentando su nuevo disco
La Onda Expansiva. A pesar de ello sus dos primeros temas fueron de su anterior disco
Sonido Forestal, Soy un Cerdo y
Huye del Monstruo. Para el tercer tema ya recuperó un tema de su anterior banda
Zodiacs con la espléndida
Kowalski. Con estas primeras canciones
Garbayo ya deja claro que el concierto iba a ser de todo menos tranquilo. Energía rockera desplegada por el escenario con Pit Odoyaga con certeros riffs y Lander Moya aportando robustez en el sonido con el bajo. Poco descanso entre canción y canción. Directo al grano. Fueron sonando temas nuevos del disco como
Delincuentes Románticos, country rock con
Gran Gorro de Paja, Psicofonías con un sonido a la Semana Santa incluido y, como no,
Mejillas, tema co escrito con el getxotarra
Ricardo Lezón.
Garbayo recuperó más temas de
Zodiacs como
Carretera del Norte o
Chica Normal con un toque a
Tequila. La parte final fue apoteósica con Ignacio Garbayo despojado de su guitarra y con
Lee Perk a la misma con unos últimos tremas efervescentes como
Iron man y
Muévete. El último tema a modo de bis fue todo un clásico como es
Balada de un Enterrador con su potente rock n´roll. Gran sabor de boca dejo
Garbayo en su concierto en el Kafe Antzokia. Una banda muy rodada y que llevan tocando juntos desde hace años y a pesar de la distancia (recordemos que Ignacio vive ahora en la Sierra de Gredos) se conocen bien y son capaces de dar conciertos de efusivo rock n´roll y cargarte las pilas.
Garbayo habían dejado el listón bien alto y había calentado y de que manera al público. La siguiente banda de la noche consiguió rematar la jugada en otro concierto incendiario cargado de diversión, rock n´roll y baile.
La definición de poner la sala patas arriba sería lo que hizo
Lie Detectors en su concierto en el Kafe Antzokia. Sonidos garajeros con toques psicodélicos y un cantante que es puro histrionismo con sus caras, sus bailes y su forma de animar a la parroquia. Así los donostiarras fueron calentando al personal con temas como
Megatón Ye-ye, letras más cuidadas como
Sin ti no Puedo Estar y la mejor de la noche
Felicidad. Y precisamente eso es lo que contagia la banda, mucha felicidad y ganas de bailar. Así lo demostró el público con
Pínchalo en donde ya se vieron los primeros pogos con Alex Ron de
Daltonics como principal artífice del mismo. A partir de aquí el desfase fue total con Txema bajando en repetidas ocasiones a cantar y bailar entre el público, arrastrándose por el escenario e inclusive rodando escaleras abajo. Sonaron temas como la oda a la cerveza que es
El Regalo, un tema muy acelarado con el organo a todo trapo y poner patas arriba la sala con
Me Gusta la Calle como último tema. No parecía que iban a salir pero el público lo pidió. Los técnicos del Antzoki no lo esperaban y no se les vio muy felices por su vuelta al escenario (luego comprendimos que había mucha cola para entrar a la sala). Fue doble el bis de
Lie Detectors con
Hoy como Ayer como primer tema en donde Alex Ron subió al escenario a tocar la armónica.
En fin una noche redonda de energía rockera para los que dudan de la fuerza y diversión que desprende el rock n´roll en directo. Dos bandas que dieron lo mejor de si en una noche de emociones fuertes. Por más noches así.
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