Lugar: Abandoibarra
Público: Indiferente
Duración: 100 minutos
Público: Indiferente
Duración: 100 minutos
13/07/2011
Siempre es difícil tocar como telonero de un grupo con gran tirón popular y tanto L.A. como TheWalkmen lo sufrieron en sus carnes.
Los primeros en saltar al escenario con puntualidad fueron el quinteto mallorquín L.A. que venían a presentarnos su disco Heavenly Hell. Su pop-rock cantado en ingles por la estupenda voz de Lluis no fue recibido como debería. Estuvieron bien y sus canciones en un espacio más pequeño y con un público más predispuesto a escuchar su música podría haber conseguido buenos momentos. Tocaron poco más de media hora que tal vez se les hizo un poco larga y el escenario se les quedo demasiado grande. Un grupo que necesita más escuchas para entrar en su mundo.
Si L.A. hizo un concierto correcto, el siguiente grupo dejó muy frío. Los neoyorquinos The Walkmen venían a presentar su último disco editado el año pasado llamado Lisbon. Su directo fue soporífero y aburrido y el supuesto post-punk revival no apareció por ningún sitio. La banda era completamente inexistente y ni tan siquiera se movían. Estaban estáticos. Su cantante Hamilton Leithauser vestido con americana y corbata era un cantante muy limitado y poco expresivo y le costó soltar el pie de micro para moverse por el escenario. Fue, con diferencia, lo peor de esta noche. Les faltaba algo más de sangre.
En fin, los grupos que son teloneros de cualquier grupo de postín saben de antemano que se van a encontrar. Un público que van a escucharles sus dos primeras canciones para ver que tal son y si no ofrecen un buen espectáculo ya no les vuelven hacer caso. Esto es lo que les pasó a los dos grupos. Pueden tener buenas canciones pero les faltan tablas para conseguir la atención de un público que no ha ido a verles y que no mostraron excesivo interés por lo que pasaba encima del escenario.
Los primeros en saltar al escenario con puntualidad fueron el quinteto mallorquín L.A. que venían a presentarnos su disco Heavenly Hell. Su pop-rock cantado en ingles por la estupenda voz de Lluis no fue recibido como debería. Estuvieron bien y sus canciones en un espacio más pequeño y con un público más predispuesto a escuchar su música podría haber conseguido buenos momentos. Tocaron poco más de media hora que tal vez se les hizo un poco larga y el escenario se les quedo demasiado grande. Un grupo que necesita más escuchas para entrar en su mundo.
Si L.A. hizo un concierto correcto, el siguiente grupo dejó muy frío. Los neoyorquinos The Walkmen venían a presentar su último disco editado el año pasado llamado Lisbon. Su directo fue soporífero y aburrido y el supuesto post-punk revival no apareció por ningún sitio. La banda era completamente inexistente y ni tan siquiera se movían. Estaban estáticos. Su cantante Hamilton Leithauser vestido con americana y corbata era un cantante muy limitado y poco expresivo y le costó soltar el pie de micro para moverse por el escenario. Fue, con diferencia, lo peor de esta noche. Les faltaba algo más de sangre.
En fin, los grupos que son teloneros de cualquier grupo de postín saben de antemano que se van a encontrar. Un público que van a escucharles sus dos primeras canciones para ver que tal son y si no ofrecen un buen espectáculo ya no les vuelven hacer caso. Esto es lo que les pasó a los dos grupos. Pueden tener buenas canciones pero les faltan tablas para conseguir la atención de un público que no ha ido a verles y que no mostraron excesivo interés por lo que pasaba encima del escenario.
A mi tambien me gusto mas L.A. ,aunque tampoco me maravillaron. Tampoco podia prestar mucha atencion porque el publico no dejaba de hablar sin prestar atencion al escenario.El cantante de The Walkmen parecia que acababa de salir de trabajar por su traje y estaba como desubicado.
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