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21 de julio de 2012

LA FÁCIL TRISTEZA DE MALDITA NEREA

Maldita Nerea ofreció un corto concierto en donde destacó la gran afluencia de público.

Lugar: Avenida Reina Vicotria (Santurce)
Público: Lleno
Duración: 85 minutos
20/07/2012

Hasta los topes estaba la "explanada" en donde desde hace unos pocos años se realizan los conciertos de fiestas de Santurce. Una autentica caja de cerillas oscura e incomoda y con grave peligro si hubiese alguna desgracia. Practicamente la única entrada y salida para acceder es cruzando las vías del tren, un sitio estrecho en el que encima te lo puedes encontrar con gente parada hablando entre ellos atascando la salida o entrada y en donde a pesar de la gran masificación que hubo ayer, te puedes encontrar a un buen número de chavalería sentada en el suelo haciendo botellón.

En lo musical, el grupo murciano Maldita Nerea venía a presentar su nuevo disco Fácil. Y eso es lo que ofreció el sexteto liderado por el soso Jorge Ruiz. Un compendio de música fácil y monótona en donde cada canción es igual a la siguiente. Tiene la misma estructura las composiciones y lo único que varía son las letras que hablan sobre todo de amor y desamor. Sonaron canciones de discos anteriores como Piedra, Papel y Tijera con nuevas composiciones como la que da título al disco Fácil pero todo sonaba igual. A pesar de llevar tres guitarristas, en ningún momento se escuchó una guitarra más alta que la otra y prevaleció siempre la guitarra acústica. El público tuvo gran importancia en el concierto ya que eran continuos los coros y hasta en algunas ocasiones Jorge les dejaba cantar las canciones enteras. Público eminentemente femenino y adolescente como quedó patente cuando Jorge jugó con el público e hizo gritar a los hombres y a las mujeres por separado.
Jorge estuvo comunicativo con el público. Uno de los momentos más divertidos del concierto fue cuando pasó un tren por las vías pitando y Jorge se sorprendió. Dijo que esto no le había pasado nunca. Presentó Verso acabado. Punto como la canción más triste que había escrito y que cuando la escribió la letra en una cafetería de Nueva York lloró. Entre coro y coro el concierto estaba llegando a su fin y con la algo más animada ¿No Podíamos ser agua? acabó el concierto después de poco más de 70 minutos en donde hubo tiempo para hacer propaganda y todo.
Ya en los bises y con un público femenino y adolescente deseoso de cantar nos tocaron la conocida En el Mundo Genial de las Cosas que dices y se despidieron con su clásico El Secreto de las Tortugas después de algo más de hora y veinte minutos de concierto.

Concierto plano, corto y sin variedad en el sonido en un lugar que consigue que cada concierto sea una tortura para el espectador.

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