Lugar: Kafe Antzokia
Público: 150 personas
Duración: 160 minutos
19/12/2012
Final del nuevo concurso Euskaltel Musik On. No hubo excesivo público y es que una final en miércoles y acabando a las 23:30h. no arrastra mucha gente. Tal como pasó en la semifinal en la sala Azkena hace un par de semanas propuestas muy diferentes, otros de los handicap de este concurso. Desde Gipuzkoa metal, desde Bizkaia funk y música negra y de baile y desde Alava rock psicodélico.
Los primeros en salir al escenario a las 20:45h fueron el quinteto de Rentería Drakken. Todo un espectáculo verles en directo. Una gran base rítmica sustentada por buenos guitarristas que daban todo en el escenario y un gran bajista pero si hay algo que hay que destacar de Drakken es su excelente vocalista Yonoko. Todo un showman. Como cantante dio un gran concierto aportando rabia y agresividad a las canciones pero creo un gran espectáculo al margen de la música. No paró un momento y el Antzoki se le quedaba pequeño. Bajo en incontables veces del escenario a crear pogos con sus amigos que habían venido en bus desde Gipuzkoa, se subió al piso de arriba para cantar, se subió a la barandilla e inclusive en el no va más se fue hasta detrás de la barra del bar a cantar. Puro espectáculo. Además corría cierto peligro ya que desde el principio saltó al escenario descalzo.
En cuanto a lo musical el grupo practica un metalcore melódico cantado en euskera y con alguna base programada y ya han publicado un disco en 2010 llamado Zolt. No faltaron temas como Gauko Begietan o Iheslari. Excelente grupo que da todo sobre el escenario y que es todo energía. Además en lo musical cumplen con creces y dieron un gran concierto con un sonido contundente y con pegada. Habrá que seguir la pista de Drakken ya que tienen todo para dar que hablar en un futuro cercano. 
La música bizkaino estaba representada por el grupo Priscilla Band que fueron los siguientes. Segunda final en un concurso de Priscilla Band en este 2012 tras el villa de Bilbao en el que quedaron terceros a pesar de ser uno de los grupos que más premios ganaron. No tuvieron suerte en el concierto de la noche del miércoles. No fue por culpa suya pero sufrieron uno de los peores sonidos que se recuerdan en el Kafe Antzokia y no empezaron a leventar el vuelo hasta la tercera canción. Comenzaron con una pequeña presentación como siempre y ya se dejaba escuchar los problemas con el sonido. Un bajo excesivamente alto, una batería que no sonaba y una sección de vientos con sonido bajo. La cosa no mejoró cuando salió Juantxu su cantante y es que estaba la voz tan baja que ni se le entendía.
No fue hasta la mitad de la tercera canción con ese gran solo de saxo cuando el sonido empezó a ser audible y entonces el grupo sonó como acostumbra aunque a Juantxu se le seguía oyendo algo bajo. En cuanto al concierto es de agradecer que dieran un concierto diferente variando el orden de las canciones y manteniendo un ritmo constante e in crescendo con una parte central imponente con temas como Come With me o la irresistible Olor a Fonk. Para despedirse eligieron una canción curiosa, divertida y antigua, Funky Chicken. Aunque les costó por los problemas de sonido dieron un buen concierto y es que son una gran banda en directo con músicos excelentes y saben calentar el ambiente con grandes dosis de baile y buena música. A pesar de no ganar de nuevo esta final ha sido un gran año para Priscilla Band.
Álava estaba representado por el cuarteto Sacramento que fueron los encargados de cerrar el concurso. Poco más de 50 personas estaban en el Antzoki para verles y es que salieron pasadas las 22:40h. A la postre fueron los ganadores del concurso y por lo visto en su concierto es un justo premio. Rock psicodélico con largos pasajes de rock progresivo en donde de vez en cuando cantan en euskera. Hay que destacar a sus dos guitarristas y en especial la guitarra de su cantante Txus Lopez de Mendiguren. Tiraron de rock psicodélico desde el principio con aires de rock de los setenta con gran protagonismo de una guitarra con distorsión y efectos en los pedales hasta que llegó el turno del único tema más tranquilo de la velada, Elur Printzesa en donde Antón dejó el bajo para tocar los teclados.
A partir de esta canción Sacramento demostró ser un grupo de muchos quilates. Canciones soberbias con unos riffs que impresionan y una calidad que pocos pueden cuestionar. Tiraron de tablas y es que han estado o están en otros grupos de prestigio dentro de la escena rockera vitoriana y eso se nota. Solo tienen una demo con cinco temas pero tienen un gran futuro. No hay muchos grupos con tanta calidad que canten en euskera una música tan anglosajona como el rock psicodélico. Justos vencedores de esta primera edición del Euskaltel Musik On y merecedores de un premio de 3000€.
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