La Pegatina consiguieron que el público bailará y realizará pogos.
Lugar: Herriko Plaza.
Público: 3000 personas.
Duración: 225 minutos.
29/10/2018
Noche muy desapacible con mucho frío y lluvia. Toda una bilbainada aunque fuese Barakaldo es lo que cabe pensar cuando se organizan varios conciertos al aire libre a finales de octubre en Bizkaia. La posibilidad de mal tiempo está casi asegurada. Muy poco previsores fueron los organizadores de la MTV Music Week Bizkaia al programar estos conciertos y no rectificando a tiempo (por lo menos el concierto del miércoles han sido más rápidos). Buena parte de la península estaba congeldada y sobre todo en la parte norte que se anunciaba mucho frío, granizo y fuertes lluvias. Pero sabiendo que va a hacer un tiempo infernal mantienes el concierto en el mismo sitio y nadie se preocupa por el confort de los asistentes. Así las cosas no fue de extrañar la asistencia a la primera de las citas. No llegaban a 300 personas para ver a los locales Revolta Permanent bajo la lluvia (ya habían actuado en su tierra en fiestas de Barakaldo ante más gente en las txoznas). Muy mala suerte tuvieron a pesar de sus esfuerzos en su escasa media hora de actuación en la que acabaron cantando entre el escaso público. Hubo cierto momento que hasta pensamos que había más seguridad que personas en la Herriko Plaza. Mucho ertzaina, mucha protección civil, sanitarios, personal de seguridad y hasta drones y helicóptero sobrevolaban nuestras cabezas.
También bajo la lluvia en las primeras canciones actuaban los navarros Iseo & Dodosound y la sección de vientos The Mousehunters. Primero salieron Dodosound con la sección de vientos y tras una primera canción ellos solos salió Iseo. El concierto fue frío, como el ambiente. Poco público a pesar que los navarros cuentan con una importante legión de seguidores (en diciembre despedirán gira en el Kafe Antzokia con 2 fechas en la que una ya está agotada muestra del tirón del grupo). Iseo no llegó a conectar con los presentes que entre los chubasqueros y los paraguas intentaron bailar o aplaudir. En 45 minutos Iseo y su banda repasaron canciones de sus dos discos pero el concierto resultó algo lineal con su mezcla de reggae y dub y ritmos muy parecidos. A pesar de ello el público disfrutó e inclusive cantó de forma tímida canciones como Vampire o Zombies.
Un poco más de suerte tuvo Muchachito Bombo Infierno. En casi una hora y por fin sin lluvia con más público Jairo impregnó mucho ritmo, rock y por supuesto rumba a la Herriko Plaza en donde ya actuó hace varios años en sus fiestas con una plaza casi llena. Acompañado únicamente por la sección de vientos vestidos con chaquetas rojas y negras compuesta por 4 músicos y su inseparable pintor Santos de Veracruz, Muchachito comenzó con fuerza con Me Tienes Frito. El catalán repasó varias canciones de su último disco como Nuestro Largo y Gran Viaje pero sin olvidarse clásicos de su discografía como Si Tú si Yo. Con un ritmo endiablado y una sección de vientos espectacular, muy bien aguerrida y moviéndose con soltura sobre el escenario, Muchachito continuaba con temas como Azul. Ya en la recta final llegaron sus temas más rápidos con esa rumba canalla marca de la casa como el tema El Compadre o la preciosa Ojala No te Hubiese conocido Nunca, todo un clásico del catalán. Buen concierto de Muchachito que intentó calentar en una noche difícil el ambiente por medio de su rumba, rápidas, infecciosas y una sección de vientos muy dinámica en el que destacamos al saxofonista que realizó un impresionante solo en una de las canciones.
Llegaba el turno para el cabeza de cartel, La Pegatina. Ya se notaba más gente en la Herriko Plaza, incluso en la innecesaria zona VIP en donde se podían ver a televisivos como Iñaki López bailando con la música de Muchachito y varios componentes de La Pegatina viendo tanto el concierto de Iseo como de Muchachito.
Con mucha puntualidad, como en toda la noche, salían La Pegatina en su última visita este año a Euskadi. En agosto llenaron la explanada del museo Guggenheim en fiestas de Bilbao y ahora volvían pero a Barakaldo consiguiendo la mejor entrada de la noche pero sin llenar. Su concierto fue más reducido que en agosto (tan solo una hora) y muy parecido tanto en su comienzo detrás de unos telones cuando pedían libertad de expresión (en el tema Ahora o Nunca). Comenzaron como en Bilbao con su tema Heridas de Guerra con explosión de confetis y a partir de ahí y casi sin descanso mucha fiesta, baile, palmas y una banda que se movía constantemente por el escenario. Hay que destacar el impresionante sonido de los conciertos con un sonido muy limpio que hace disfrutar de los directos como pocas veces se ha hecho (si hay que ponerle una pega sería que tal vez en muchas canciones el micro de Adriá estuvo algo bajo). Hubo de todo desde la cumbia de Miranda en el que los catalanes pidieron al público que se moviera de lado a lado de la plaza y más sonidos latinos como la excelente El Curandero. Como es habitual también cantaron en otros idiomas como en italiano Mamma Mía, en catalán No Som d´aquí. Tras despedirse volvieron para cerrar con dos clásicos del grupo que no pueden faltar. La ansiada Mari Carmen en donde se desataron una vez más los bailes y los pogos y terminar definitivamente con la muy festival Lloverá y yo Veré con Rubén Sierra surfeando entre el público. Muy buen concierto de La Pegatina, muy divertidos y una banda que sabe muy bien que hacer para levantar una noche fría.
Llegaba el turno para el cabeza de cartel, La Pegatina. Ya se notaba más gente en la Herriko Plaza, incluso en la innecesaria zona VIP en donde se podían ver a televisivos como Iñaki López bailando con la música de Muchachito y varios componentes de La Pegatina viendo tanto el concierto de Iseo como de Muchachito.
Con mucha puntualidad, como en toda la noche, salían La Pegatina en su última visita este año a Euskadi. En agosto llenaron la explanada del museo Guggenheim en fiestas de Bilbao y ahora volvían pero a Barakaldo consiguiendo la mejor entrada de la noche pero sin llenar. Su concierto fue más reducido que en agosto (tan solo una hora) y muy parecido tanto en su comienzo detrás de unos telones cuando pedían libertad de expresión (en el tema Ahora o Nunca). Comenzaron como en Bilbao con su tema Heridas de Guerra con explosión de confetis y a partir de ahí y casi sin descanso mucha fiesta, baile, palmas y una banda que se movía constantemente por el escenario. Hay que destacar el impresionante sonido de los conciertos con un sonido muy limpio que hace disfrutar de los directos como pocas veces se ha hecho (si hay que ponerle una pega sería que tal vez en muchas canciones el micro de Adriá estuvo algo bajo). Hubo de todo desde la cumbia de Miranda en el que los catalanes pidieron al público que se moviera de lado a lado de la plaza y más sonidos latinos como la excelente El Curandero. Como es habitual también cantaron en otros idiomas como en italiano Mamma Mía, en catalán No Som d´aquí. Tras despedirse volvieron para cerrar con dos clásicos del grupo que no pueden faltar. La ansiada Mari Carmen en donde se desataron una vez más los bailes y los pogos y terminar definitivamente con la muy festival Lloverá y yo Veré con Rubén Sierra surfeando entre el público. Muy buen concierto de La Pegatina, muy divertidos y una banda que sabe muy bien que hacer para levantar una noche fría.
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