Pennywise dan un concierto tan intenso como corto cargado de energía y proclamas contra los políticos y los ricos.
Lugar: Botica Vieja
Público: 8000 personas aproximadamente
Duración: 70 minutos
Público: 8000 personas aproximadamente
Duración: 70 minutos
21/08/2011
Con muchisima puntualidad e inclusive un minuto antes de las 00:00h. los californianos ya estaban desparramando su punk-rock sobre el escenario. Después de la suspensión del concierto de Simple Plan, el cuarteto ha sido el plan de urgencia de los organizadores y a muchos habrá contentado esta sustitución a juzgar por las muchas camisetas del grupo que había en la explanada de Botica Vieja.
Con mucha intensidad, Pennywise iniciaron su concierto directo al grano. Tocaron tres canciones casi seguidas ante un público que se sabía todas las canciones. En la segunda de estas, el guitarrista Fletcher Dragge proclamó su odio a los gobernantes y políticos y es que, esa fue la tónica en los discursos del cuarteto. Proclamas contra los políticos, gobernantes, policías y ricos. No falto su tema Fuck Authority. Después de estos tres trallazos el público ya estaba caliente y Fletcher invito al público a que hicieran círculos y el respetable gustoso inicio la danza empujándose unos a otros en circulo. Todo el concierto sonó bastante bien, con intensidad en la guitarra, un bajo penetrante y una batería que marcaba bien los ritmos. A las voces estaba Zoltán Téglàs que cumplió aunque en la parte final igual se quedo un poco justo de voz. Es un buen sustituto pero tenía más fuerza en la voz Jim Lindberg.
En un parte del concierto Fletcher se acordó de Simple Plan y pregunto si había a alguien que había venido a ver a los canadienses con abucheos incluidos del público. Zoltán dedicó una canción a los muertos en un festival de Bélgica y recordó que ellos han tocado en muchos festivales a lo largo del mundo. El ambiente estaba caldeado y las primeras filas eran un hervidero ante los continuos círculos en el que si entrabas no sabías como ibas a acabar. Esto es un concierto punk-rock y no se escuchan en las radios nos dijo Fletcher.
No faltaron ninguno de sus éxitos a lo largo del concierto, Every Single Day, Same Old Story, Society, Straight Ahead e inclusive una versión acelerada de Stand By me que no les quedo muy redonda, esta claro que lo de cantar no se le da bien al bajista Randy Bradbury.
Tras una hora de concierto el grupo se retiro para volver más tarde con los preceptivos bises y tocar lo que les quedaba en el arsenal (que no era poco). Alien y todo un himno punk que la gente estaba esperando cantarla desesperadamente, Bro Hymn en donde ya Botica Vieja estaba patas arriba y en donde todos coreamos esta gran canción.
Buen directo del cuarteto tocado a machete sin apenas descanso, sin florituras ni extensos desarrollos musicales, tuvieron mucha actitud sobre el escenario, no como otros grupos de su generación con más fama como The Offspring, canciones cortas pero que dicen muchas cosas. El público salio contento y sudoroso del concierto y la banda cumplió con la papelete. No habrá sido fácil traerles con tan poco tiempo de margen por lo que sera mejor no preguntarnos cual ha sido el cache del cuarteto porque el Ayuntamiento habrá pagado bastante dinero por ellos. Por lo menos no fueron unos cadáveres andantes que no ofrecen nada como otros años. Recordar el año pasado el concierto de la ELO.
Con mucha intensidad, Pennywise iniciaron su concierto directo al grano. Tocaron tres canciones casi seguidas ante un público que se sabía todas las canciones. En la segunda de estas, el guitarrista Fletcher Dragge proclamó su odio a los gobernantes y políticos y es que, esa fue la tónica en los discursos del cuarteto. Proclamas contra los políticos, gobernantes, policías y ricos. No falto su tema Fuck Authority. Después de estos tres trallazos el público ya estaba caliente y Fletcher invito al público a que hicieran círculos y el respetable gustoso inicio la danza empujándose unos a otros en circulo. Todo el concierto sonó bastante bien, con intensidad en la guitarra, un bajo penetrante y una batería que marcaba bien los ritmos. A las voces estaba Zoltán Téglàs que cumplió aunque en la parte final igual se quedo un poco justo de voz. Es un buen sustituto pero tenía más fuerza en la voz Jim Lindberg.
En un parte del concierto Fletcher se acordó de Simple Plan y pregunto si había a alguien que había venido a ver a los canadienses con abucheos incluidos del público. Zoltán dedicó una canción a los muertos en un festival de Bélgica y recordó que ellos han tocado en muchos festivales a lo largo del mundo. El ambiente estaba caldeado y las primeras filas eran un hervidero ante los continuos círculos en el que si entrabas no sabías como ibas a acabar. Esto es un concierto punk-rock y no se escuchan en las radios nos dijo Fletcher.
No faltaron ninguno de sus éxitos a lo largo del concierto, Every Single Day, Same Old Story, Society, Straight Ahead e inclusive una versión acelerada de Stand By me que no les quedo muy redonda, esta claro que lo de cantar no se le da bien al bajista Randy Bradbury.
Tras una hora de concierto el grupo se retiro para volver más tarde con los preceptivos bises y tocar lo que les quedaba en el arsenal (que no era poco). Alien y todo un himno punk que la gente estaba esperando cantarla desesperadamente, Bro Hymn en donde ya Botica Vieja estaba patas arriba y en donde todos coreamos esta gran canción.
Buen directo del cuarteto tocado a machete sin apenas descanso, sin florituras ni extensos desarrollos musicales, tuvieron mucha actitud sobre el escenario, no como otros grupos de su generación con más fama como The Offspring, canciones cortas pero que dicen muchas cosas. El público salio contento y sudoroso del concierto y la banda cumplió con la papelete. No habrá sido fácil traerles con tan poco tiempo de margen por lo que sera mejor no preguntarnos cual ha sido el cache del cuarteto porque el Ayuntamiento habrá pagado bastante dinero por ellos. Por lo menos no fueron unos cadáveres andantes que no ofrecen nada como otros años. Recordar el año pasado el concierto de la ELO.
Yo fui uno de los que se alegro del cambio y no me decepciono. Un concierto punk como debe ser, corto directo y rapido. La verdad que adentrarse en las primeras filas era solo apto para valientes.
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