John Franks acabó a hombros en su gran concierto en el festival cervecero getxotarra.
Lugar: Puerto Viejo de Algorta.
Público: Lleno.
Duración: 135 minutos.
01/06/2019
Tiempo veraniego el de este fin de semana en Bizkaia. Muchos festivales y eventos musicales se celebraban el sábado en Bizkaia y tal vez por el buen tiempo apetecía disfrutar de la música en directo al aire libre al lado de la playa. Algorta celebraba un año más el festival gratuito patrocinado por una marca cervecera San Miguel Getxo Music & Food. Un ambiente inmejorable en un marco incomparable al lado del mar y un público que llenó la campa de risas, alegría y baile. De nuevo hay que destacar la masiva afluencia de niños al concierto que copaban las primeras filas. Además no pararon de bailar, saltar y hasta cantar. Hay relevo generacional.
En un festival que comenzaba por la mañana, acudimos al único grupo nacional del cartel a pesar de que el cantante del grupo, Borja, sea de Getxo. Desde Madrid y con claro sabor reggae Papawanda. Unos minutos antes de las 19:30h. en formato de sexteto Papawanda ya estaba sobre el escenario. En una hora exacta de directo la banda ofreció un directo muy correcto con claro sabor reggae y con sonidos de fusión como el swing o inclusive el jazz. Con tres discos a sus espaldas, los madrileños repasaron su discografía aunque se centraron en su último trabajo Hasta Que Seamos Ceniza. No faltaron temas de este trabajo como Respira con un ejercicio conjunto por parte de la banda y el público de respiración y relajación o el destacable tema que da título a este último trabajo. El mejor tema de la tarde fue la más tranquila en un principio Un Trozo con una letra bonita y bien elaborada. Hay que destacar que estrenaban un nuevo batería pero el concierto no se resintió y completaron un buen concierto.
Tras un largo cambio sobre el escenario (45 minutos), los getxotarras Smile salían al escenario con un cuarto de hora de retraso con la canción de la película de Monty Python Always Look on the Bright Side of Life, toda una declaración de intenciones. Sus primeras temas fueron de claro sonido de pop melódico. John vestido completamente de blanco y con camiseta de los Beach Boys andaba algo justo de voz. Con un tema tan especial como Do As I Want con ukelele fue un tema perfecto con el mar al lado y con el sol poniéndose y así pedir los primeros coros al público. En ese momento John comentó que este solo era el principio y que a partir de ahora el concierto iba a subir en intensidad. Y vaya si lo hizo.
Smile consiguieron que toda la llena campa del Puerto Viejo bailará y cantará en todo momento. Hubo grandes momentos de conexión total por parte de la banda y el público en temas como Light you Up o sobre todo su éxito When the Lights Change con un público cantando y saltando inclusive las primeras filas llenas de niños. Los getxotarras presentaban su último EP publicado este mismo año llamado I´m Gonna Keep on Standing Up destacando la curiosa Pum Pum Pum, una rareza en la discografía de la banda ya que es un tema cantado en castellano. Pero la fiesta se desató en la parte final de forma espectacular. Una vez más Born Again puso la felicidad y la alegría con su mensaje positivo de que haríamos si viviéramos de nuevo en el que John se bajo del escenario para cantar y bailar entre el público. Hasta el final John no paró encima del escenario y pasó gran parte de las últimas canciones de Smile entre el público e inclusive le subieron a hombros (como curiosidad dijo que era su vecino). El concierto casi no tenía descanso en esta parte final (solo pararon para reclamar a los padres de un par de niños perdidos). Y hablando de niños tampoco faltaron en el tema City Girl en donde Frank pidió que subieran niños al escenario (12 como mucho aunque al final fueron más) y allí todos juntos montaron otra gran fiesta.
Gran concierto una vez más de Smile que consiguen una comunión total con todos los que acuden a sus conciertos. Tal vez sea la banda que dé los directos más entretenidos y divertidos del panorama nacional. Saben como animar al personal y llevan al público hasta donde quieren ellos. Además musicalmente han sabido reinventarse de un sonido más folk o country de sus inicios con sabor americano y a surf a un sonido casi más electrónico y bailable pero manteniendo su esencia. No hay mejor nombre que defina mejor lo que hacen los getxotarras, Smile. Y es que todos los que disfrutan de su concierto salen con una sonrisa y muy felices de los que han visto sobre el escenario y debajo del mismo.
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