Una sinfín de conciertos se realizaron el martes en Bilbao destacando las bandas más cercanas.
El martes fue la primera jornada del
BIME Live. Buena parte de las salas bilbaínas albergaban una gran cantidad de conciertos, muchas coincidiendo en horario aunque no tanto en estilo. Música para todos los gustos con unas salas que tuvieron mucho público y es que recordemos que todos los conciertos son gratuitos y de entrada libre aunque tiene preferencia los acreditados del festival con pulsera.
Felix Buff, batería de los rockeros
Willis Drummond, se presentaba en el BIME Live en Bilborock para presentar se segundo disco en solitario publicado el año pasado
The Dancing King bajo el nombre de
Rüdiger. Con su banda de lujo habitual en donde destaca el navarro Joseba Irazoki a la guitarra, su directo de 40 minutos fue muy especial. Su música se aleja completamente de los sonidos más rockeros para abrazar otros estilos. Hay electrónica, hay jazz, hay pop. En fin sonidos muy eclécitcos pero hechos con mucho gusto y cuidando los detalles y las melodías. además de temas nuevos
Rüdiger también repasaron temas de su primer disco como una de las cimas de la velada
Medication, con algo de psicodélia. Pero tal vez el mejor tema de la noche fue uno nuevo. El denso
Spot On en donde más brilla su banda. Es un tema complejo en donde se unen todas las influencias. Sonidos acústicos, alguna base más electrónica y rock en la parte final. Una mezla curiosa que puede sonar desde los
Beatles a
Radiohead. Algo más de media entrada para ver de nuevo a
Rüdiger en concierto siendo la primera vez que tocaba en Bilborock. Un directo con buen gusto cuidando cada detalle musical y con melodías bien trabajadas.
Cambio de sala para ver a una de las bandas vascas emergentes
Ezezez. Con un Stage Live al borde del lleno el cuarteto, quinteto en varios ocasiones con la incorporación de un trompetista, pusieron patas arriba la sala. Fue un directo rápido, sudorosos y cargado de energía. Curioso que una banda muy joven atraiga a tanta juventud para una música anclada en los años 80 pero es la moda acutal. Post punk y acercamientos al after punk en sus temas más rabiosos como es el caso de
Arrantzalemarinero con buen trabajo de ambas guitarras. Algo
Weezer sonó
Dutxita. Pero la banda iba a más. Introdujeron su tema
Txakurko con la versión de
Believe de
Cher cantada por su otro guitarrista y ya con el pintarrajeada Unai Madariaga desatado echaron el resto en la recta final con una brutal
Ezezez en donde llegaron los pogos al Stage Live y con Unai cantando encima de la barra. Solvente directo de los bilbaínos
Ezezez en el que tal vez el sonido no fue todo lo bueno que hubiesemos deseado y en donde las luces no acompañaron. La banda es todo un volcán en erupción e intenta que en sus directos la gente pase un rato muy entretenido y sudoroso.
Nuevo cambio de sala y esta vez al Crystal para ver el debut en Bilbao del trío Calequi y las Panteras aunque oficiaron, como es lógico, en cuarteto. Presentaban su nuevo trabajo
Mezcla Rica publicado a finales del año pasado que es todo un viaje sonoro por Latinoamerica. Entre el funk, la cumbia, el afropop y ritmos latinos se mueve esta banda con Javier Calequi al frente que es director musical de
Jorge Drexler y se nota su influencia en su forma de cantar. La banda incita irremediablemente al baile e inclusive en varias ocasiones Luisa Corral bajó a bailar entre el público. En varias canciones hasta bailaron de forma conjunta Javier, Lauri y Luisa. En lo musical destacaron temas con claro sabor funky como
Sandia, los ritmos caribeños de
Ke lo Ke (Santa Domingo RD)en una onda
Juan Luis Guerra en la que en el disco colabora
Xoel López y con aire de bosa nova de
Bailando en Sampa (Sao Paulo). En el
BIME hay bandas de todo tipo y el trío intentó animar a un público que no era el suyo. Su directo no brilló y es que sonaron en lo musical con muy pocos matices y pocos elementos.
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