Dover encarán la recta final de la gira aniversario de su disco Devil Came to me.
Lugar: Sala Backstage
Público: Sould out
Duración: 85 minutos.
14/12/2013
Tras el fracaso que supuso su anterior disco I Ka Kené, Dover tenía la dificil papeleta de decidir hacia donde iban. Mientras se piensan cual va a ser su próximo paso en lo musical, este año el cuarteto decidió emprender una gira aniversario para celebrar el 15 aniversario de la publicación de su segundo disco. Devil Came to me puso patas arriba la música nacional en la década de los 90. Un grupo liderado por dos hermanas que cantaban en inglés y que hacían un rock duro influenciado por el grunge de Nirvana. Era el nacimiento en lo que se ha denominado por los expertos la música indie. Tras vender millones de copias de sus discos en la época dorada de Dover, la de los 90, el grupo pareció cansarse de la formula y entrado en el siglo XXI deciden hacer un cambio radical en su música y en su estilo consiguiendo bastante popularidad en las radiofórmulas. Fue un cambio arriesgado y que corrieron ríos de tinta de sus detractores pero ellos consiguieron un nuevo público (menos fiel). Ahora en el 2013 han mirado al pasado para recordar sus viejas canciones para coger impulso para el futuro.
Pasadas las 22:15h. y en la nueva sala bilbaína Backstage (antiguo Congreso) llena hasta los topes y con un calor axfisiante, salían los 4 miembros de Dover al pequeño escenario. Es curioso que en esta gira en la que retoman el rock de sus comienzos elijan salas de pequeño aforo en donde el público está cerca de ellos y no en lugares más amplios en donde seguro que también llenarían. Es como si en realidad si quisieran recordar sus inicios en salas pequeñas donde comenzaron a tocar. Rain of the Times fue la primera de la noche. Tras otro par de temas de Devil Came to me llegaba el turno de recordar un tema de su tercer disco, el más rockero y duro de su carrera Late at Night. Four Graves sonó bien con buenos riffs, la fuerza de Jesús Antúnez en la batería y Samuel Titos que fue de los más destacado del concierto y es que se le ve disfrutar más en este formato más rockero que en los conciertos electrónicos.
Donde si se nota el paso del tiempo es en la voz de Cristina. Ya no llega a ciertos tonos y esto se hace patente en la salvaje La Monja Mellada, un pildorazo de rabia que no llega a los dos minutos en donde se nota que anda justita de voz. Como es habitual en Dover la voz cantante cuando hay que hablar al público la lleva Amparo. Nos recordó la historia de la canción DJ, primer single de Late at Night, cuando presentaron esta canción a su discográfica y les dijeron que estaban locos si pensaban sacar ese tema como primer single. Una canción potente y dura con un gran trabajo de guitarras de Amparo LLanos. Continuaron con más canciones de este disco como la marcianada Flashback, un tema en donde se deja notar la sencillez y la dureza de Dover.
Los corazones de los asistentes se pusieron en un puño con el gran clásico de la banda, Serenade. Un tema precioso con una buena melodía y en donde el público marcó bien los coros. Con el público emocionado recordando estas viejas canciones que muchos pensábamos no volver a escucharlas tras el cambio, Dover apostaron de nuevo por la fuerza con Far, uno de los mejores temas de su tercer disco. Amparo volvió a coger el micro para presentar las canciones del primer disco de Dover, Sister, un disco que reconocieron pasó desapercibido. La preciosa Angelus, un medio tiempo con Cristina bien de voz, y el tema más flojo de la noche She Will en el que Cristina recordó a su hermana que fue el primer tema que sonó de ellos en la radio (en disco grande en Radio 3).
Recta final del concierto para otro de los grandes temas del Devil Came to me, Judas, con Cristina más justita de voz en la parte final cuando la canción le exige algo más. Acabaron con el único recordatorio de su cuarto disco I Was Dead for 7 Weeks in the City of Angels. King George con una estructura más pop y sin tanta distorsión en la guitarra pero que el público lo recibió con los brazos en el aire. Tras retirarse el grupo del escenario y que en la sala pusieran un par de minutos el aire acondicionado, Dover volvieron a salir a escena para ofrecer lo que les quedaba por tocar. Cherry Lee con el público de nuevo coreando el estribillo, Devil Came to me en donde la sala se venía abajo y terminar con Loli Jackson para dejar al público con un fantástico sabor de boca.En fin Dover demostraron estar en buena forma. Fue un buen concierto y muy disfrutable para los seguidores más veteranos de la banda. Siguen sonando bien. La fuerza de las guitarras de Amparo y Cristina siguen intactas aunque el verdadero músculo del grupo sean Jesús Antúnez y un fantástico Samuel Titos al bajo. Queda claro a pesar de ello que esos tiempos no volverán. Cristina no llega a los registros más altos, no desparraman fuerza sobre el escenario como hacían en los 90 pero es que el tiempo ha pasado y ya son 15 años lo que han pasado. Tras esta gira triunfal de Dover recordando su pasado veremos con lo que nos sorprenden las hermanas LLanos y compañía en su próximo disco que seguro, como es habitual, no dejerá indiferente a nadie.
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