SONIDOS DISPARES Y SIN PREJUICIOS EN LA NUEVA JORNADA DEL CONCURSO VILLA DE BILBAO SECCIÓN POP- ROCK

Los ritmos caóticos y cambiantes de Alien Tango conquistaron Bilborock.

Lugar: Bilborock.

Público: Media entrada.

Duración: 115 minutos.

5/10/2017

   Primera jornada del concurso pop- rock villa de Bilbao en octubre en donde una vez más los ritmos fueron muy cambiantes con grupos muy diferentes entre si. Una vez más algún grupo hubiese tenido acomodo en otra sección pero las bases del concurso permiten que estos grupos puedan tocar en esta sección. La de este jueves ha sido la mejor jornada de las 5 que llevamos y a buen seguro que alguno de los grupos que participaron este jueves llegará a la final de noviembre.

   Hasta un par de minutos tuvo que esperar Pablo Ríos en comenzar el concierto ya que estaba encima del escenario antes de hora. Y antes de comenzar toda una declaración de intenciones. Pablo animó a que cayeran lo tópicos de los vascos de que no bailan y no ligan. En formato de dúo el bizkaino aunque residente en Madrid intentó sin lograrlo que el público se animará a cantar y bailar pero esto es el villa de Bilbao y eso es muy difícil conseguirlo. Presentó las canciones de su primer disco Pensando Siempre en ti. Precisamente esta balada fue el segundo tema de la noche con una letra triste pero que en la parte final Pablo canta la célebre canción el patio de mi casa es particular... Y es que las letras del bizkaino son muy personales como la de Con lo que me Gusta a Mi, uno de los mejores temas de la noche. Entre el pop y la electrónica más ochentera como en el último tema de la noche Monika, Pablo Ríos ofreció un concierto muy alejado de lo que se espera de un grupo en un concurso y no llegó a conectar con el público.

  Cambio completo con el siguiente grupo. Desde Murcia nos llegaba el cuarteto Alien Tango. Buen nombre para el grupo y es que su estilo musical se puede definir como marciano. Tocaron todos los palos musicales desde un comienzo más balcánico, pasando por la psicodélica con sitar incluido y terminar con algo de discosoul. Concierto frenético y alocado para una banda que se metió al público en el bolsillo con su puesta en escena. Guitarrista con bermudas, cantante con camiseta de Pokemon. Y es que mención especial merece su cantante que tan pronto cantaba en falsete a lo Nika como de una forma más estridente. Mucho sintetizador, coros alocados pero bien definidos para un grupo que se mueve entre Foxygen o Ariel Pink. Gran concierto de una banda que ha sorprendido a propios y extraños y que poco a poco va consiguiendo estar en algún festival importante en nuestro país.

   Si destacado había sido el concierto de los murcianos no menos destacado fue la de la joven banda bizkaina The Crazy Wheels Band. Hacía tiempo que no les veíamos y el grupo ha crecido mucho. Un sonido bien definido y equilibrado y jugando bien sus bazas. Fueron intercalando canciones en inglés y en euskera de su primer disco publicado este mismo año Mundua Sutan. El grupo nos llevó con gran ritmo por los ritmos de raíz americana desde el country al blues más bailable y siempre con un toque folk. Con gran protagonismo de los teclados, otra de las grandes bazas del grupo es su cantante que a pesar de los diferentes tipos de canciones que nos tocaron The Crazy Wheels Band él consiguió unas acertadas interpretaciones. No deja de ser curioso escuchar canciones con raíz americana en euskera y que no desmerezcan a las que cantan en inglés. Muy buen concierto.