De gran chapuza se puede catalogar lo sucedido con la visita del grupo de Vallecas Ska-P a Bilbao. Tras aplazar su concierto en el BEC de Barakaldo tras vender tan solo 3000 entradas para presentar su nuevo disco 99%, la promotora decidió trasladar el concierto a un sitio más pequeño y en otro fecha. Este concierto se iba a hacer finalmente en La Casilla hoy 30 de noviembre.
Los primeros problemas aparecieron a primera hora de la mañana del viernes cuando los camiones de montaje del evento llegaron a La Casilla y les denegaron el paso porque no estaban todos los papeles en regla. No se había pagado la fianza del concierto (algo obligatorio en este tipo de conciertos), además de ciertos problemas con el plan de evacuación. Tras una mañana llena de llamadas y malos entendidos, el concierto de Ska-P y Manifa se suspendía definitivamente a pesar de que el grupo intentó por todos los medios poder tocar en Bilbao, incluso buscó otra sala (la sala Santana 27) pero no fue suficiente. Esta sala puede albergar conciertos para 1700 personas y aunque el grupo había pensado en hacer 2 pases no era suficiente ya que habían vendido en torno a las 4000 personas.
Ahora tanto el promotor del concierto como el grupo Ska-p están enzarzados en una polémica sobre quién ha tenido la culpa. Ska-p culpa al delincuente- promotor por no connseguir los permisos del plan de autoprotección para el evento. Mientras el promotor cuenta que por su parte según el plan de autoprotección elaborado por una empresa para el Gobierno Vasco permitía un aforo para 4273 personas pero en la mañana del viernes les comunican que no se les da el permiso por parte de la sección juegos y espectáculos del Gobierno Vasco porque no cumple con los requisitos ya que el aforo máximo para la Casilla es de 3000 personas (recordemos que las entradas ya estaban agotadas al vender cerca de las 4000).
Sea por el motivo que sea, el gran perjudicado es el asistente al concierto que tras comprar dese hace semanas o meses su entrada (inclusive había gente que venía de fuera de Bizkaia ya que era fecha exclusiva en Euskadi) no va a poder ver a su grupo preferido. Una gran chapuza que da mala imagen tanto al grupo como a los conciertos que se realizan en Bizkaia.
Las precio de las entradas serán devueltas por los medios habituales.
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