Izal despidiéndose del público bilbaíno en una noche que recordarán.
Lugar: Abandoibarra.
Público: 7000 personas.
Duración: 90 minutos.
24/08/2016
De baja por accidente Supersubmarina y grupos como Los Planetas o Lori Meyers en stand by, Izal es en la actualidad uno de los grupos indies nacionales con más tirón solo superados, claramente, por Love of Lesbian. Izal eran uno de los platos fuertes de la noche del miércoles en las fiestas de Bilbao y a pesar de la amplia y variada competencia de los diferentes espacios públicos o privados, tal vez el mejor día de la Semana Grande, Izal consiguió una gran entrada en su concierto de Abandoibarra.
A las 23:30h. ya estaban sobre el escenario Izal. Comenzaban casi cantando un himno todos juntos Copacabana, título de su último disco. Se enciende el luminoso con con el nombre del disco y comienzan lo que iba a ser un denominador en su concierto, los coros del público. El comienzo del directo fue potente con sus canciones más conocidas desde Asuntos Delicados al single del anterior disco Hambre. Con un claro sonido de indie pop con afan de baile, Izal estaban muy animados y eso lo transmitían a los allí presentes. Como es habitual cada vez que se acercan a Bilbao Mikel recordó sus 6 años estudiando en San Mamés al igual que su compañero Alberto Pérez que tiene familia en Bilbao.
Era de esperar que uno de sus primeros comentarios fuera en recuerdo a sus amigos accidentados hace unas semanas pero el detalle también fue especial para el conductor del otro coche tal vez el gran olvidado en este asunto. Le dedicaron tanto a Supersubmarina como al conductor la canción Prueba y Error en donde Mikel canta a base de caer y levantarnos. Pero en una noche de mensajes Mikel también tuvo un recuerdo familiar. Comentó que venía de estar en Vitoria junto a su hermana y padres ya que ahora es tío desde hace poco y les dedicó la canción Pequeña Gran Revolución. Izal agradecieron a todos los presentes por estar viéndoles pero recordaron su pasado cuando empezaban y tocaban en el Cotton Club (tres veces han tocado allí según Mikel) ante poco más de 20 personas y que también hay que apoyar esa escena para que la música pueda subsistir.
Pero el concierto de Izal funciona a medias. A sus canciones les falta algo de pegada. Suenan demasiado limpias y sonidos fáciles. A Mikel se le fue la cabeza en varios momentos del concierto y tampoco ayudó que en la parte final del concierto tuvieran problemas con la guitarra eléctrica dejando al descubierto las limitaciones de su sonido. En esta recta final volvieron de forma masiva los coros (Izal deja cantar demasiado a la gente) con canciones como Tóxica, Agujeros de Gusano y sobre todo Magia y Efectos Especiales. Se despidieron tras 70 minutos de concierto con una más rockera Pánico Práctico. Llegaron los bises en forma de tres canciones más (tal vez las mejores de la noche) en donde destacaron La Mujer de Verde, uno de los singles de su último disco: Mikel se despedía de Bilbao en una noche que para ellos será inolvidable ya que era un sueño tocar en fiestas al lado del museo Guggenheim diciendo que esta noche iba a salir por txoznas con sus compañeros de la universidad (todos los años viene un día al menos) y preguntó qué txozna le recomendaba. Alguien del público soltó El Baile. En fin Izal se despedía precisamente con la canción que les faltaba por tocar, El Baile. Un buen tema pop que incita precisamente al baile en donde el grupo se alineó todos al frente del escenario con un sonido algo mas electrónico que la original y en donde Mikel se subió a la vaya de seguridad para cantar para que luego hubiese una explosión de comfetis.
Final de concierto de Izal que se dio un auténtico baño de multitudes. Es un grupo con una buena cantidad de seguidores que se saben sus canciones. No ofrecen nada nuevo de lo visto en otros grupos pero hicieron un concierto correcto y entretenido a ratos a pesar de que tanto su música como su directo les falte algo de sorpresa y sea algo lineal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario