4 de septiembre de 2016

EL AFROBEAT Y EL JAZZ PRESENTES EN EL FESTIVAL DE FOLK DE GETXO CON MARINAH

Marinah se bajó del escenario en la última de las canciones de su concierto en Getxo.

Lugar: Parking de la Plaza de la Estación de Las Arenas.
Público: 300 personas.
Duración: 95 minutos.
02/09/2016

    Segunda jornada del festival de Folk de Getxo con la actuación de la ex Ojos de Brujo Marinah que ya lleva unos cuantos años en solitario. Ahora su música ha cogido otros matices como lo demostró en la carpa habilitada para los conciertos gratuitos del festival.

   Con más de 10 minutos de retraso sobre el horario y es que el concierto de pago de la otra carpa tardó en acabar, Marinah y su banda saltaron al escenario de la carpa con mucho olor a comida y es que en la parte trasera hay un restaurante en donde dan de cenar. El concierto se fue llenando poco a poco y es que en su comienzo no había más de 150 personas. Marinah sigue ofreciendo conciertos en donde destaca su voz y su simpatía  (una pena que el sonido de las primeras canciones retumbaba mucho y no se entendía mucho lo que cantaba) pero tal vez en lo musical intenta abarcar demasiados estilos. El concierto fue algo pesado en varios momentos con largos instrumentales y excesivos solos. Muchas canciones duraban casi 10 minutos y cortaban el ritmo del concierto.

   Vestida con su característico falda roja con lunares negros, Marinah bebió de la rumba y flamenco habitual en su anterior etapa pero añadiendo otros sonidos como el latin con sabor cubano, afrobeat y hasta jazz que tal vez fue el gran protagonista de la noche. Pero donde Marinah destaca es cuando se acerca a su sonido más natural, el flamenco y la rumba con temas como Te Gusto, uno de los primeros de la noche con un estribillo muy marcado y coreable. Dentro de la amalgama de sonidos también picó del reggae con la demasiado alargada Dame Flores en donde invitó al público a hacerle unos coros. De nuevo se acercó al flamenco con Ríe Llorona aunque de nuevo alargada demasiado. Y es que ese fue el gran problema del concierto. Las canciones eran demasiado largas y parecían en muchas ocasiones improvisaciones jazzísticas con demasiados solos de bajo, piano y de percusión. De entre los músicos que acompañan a Marinah destacamos a Carlos Sarduy que se multiplicó a los teclados, trompetas y hasta en las voces. Marinah también tuvo varios recuerdos a su anterior banda, los demasiados valorados Ojos de Brujo, y el último tema de la noche fue de ellos. Con el Ventilaor R-80 despedía el concierto con Marinah formando una cadeneta de baile entre el público y de nuevo alargando la canción hasta la extenuación.
   Más que discreto concierto de Marinah en el festival de folk de Getxo. A pesar de conseguir que el público bailará los ritmos de sus canciones, Marinah intenta abarcar muchos palos de la música sin definir bien su sonido. Cuando se acercan a sonidos como la rumba, el flamenco o inclusive el son cubano suena más natural pero ahora su música tiene un poso de jazz e improvisación fingida que no le sienta tan bien y alarga en demasía unos temas que podían llegar a ser más.

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